La reciente propagación de la gripe aviar en Estados Unidos ha encendido las alarmas en México, ante el temor de que esta enfermedad altamente contagiosa entre las aves de corral cruce las fronteras. Sin embargo, en medio de la creciente preocupación, el estado de Nayarit emerge como un oasis de tranquilidad y seguridad sanitaria, gracias a las estrictas medidas de control y la infraestructura avícola local.
Marco Antonio Rojas, Dirigente de la Unión de Expendedores de Pollo en Nayarit, en una reciente entrevista, compartió las razones por las cuales el estado se encuentra en una posición privilegiada frente a este brote. “Una de las ventajas que tiene el estado de Nayarit es que los avicultores estatales mantienen una barrera muy estricta,” explicó Rojas. Esta barrera se traduce en una política rigurosa respecto al pollo que entra al estado, requiriendo que todo producto avícola foráneo sea congelado, una medida que reduce significativamente el riesgo de contagio.
Nayarit cuenta con dos empresas avícolas principales, las cuales no solo satisfacen la demanda interna del estado sino que también exportan excedentes a regiones como la Ciudad de México, Chiapas y Guanajuato. “Es muy poco probable que entre y menos contaminado,” asegura Rojas, refiriéndose al riesgo de introducción de la gripe aviar por medio de productos avícolas.
La eficacia de las medidas de salubridad implementadas por estas empresas es un pilar fundamental en la estrategia de prevención. A diferencia de otros estados, donde la entrada de pollo de diversas partes del país puede complicar los controles sanitarios, Nayarit se beneficia de una producción y consumo local que limita las posibilidades de introducción y propagación de enfermedades.
Este enfoque de autoabastecimiento y las estrictas reglas de salubridad han colocado a Nayarit en una posición de ventaja frente al desafío que representa la gripe aviar. Mientras el país se mantiene alerta ante la posible expansión de esta enfermedad, Nayarit demuestra la importancia de la prevención y el control estricto en la industria avícola para proteger tanto a la población como a su sector agrícola de posibles amenazas sanitarias.